miércoles, 7 de octubre de 2009

Actividad sobre las cruzadas

Observa el siguiente video:



1) ¿Qué fueron las cruzadas?
2) ¿Cuales fueron sus causas?
3) ¿Que paises son actualmente las regiones mencionadas?
4) ¿Quienes eran los cruzados?
5) Realiza una reflexion personal sobre las cruzadas y la situacion del mundo actual

La estructura de la Orden


MAESTRE

Solo respondía a la autoridad del Papa, aunque debía ser respetuoso con los obispos y con los reyes. Disponía de cuatro monturas, además de una especial para el combate. Como ayudantes, contaba con un secretario e intérprete árabe, un soldado de caballería ligera, un herrero, un cocinero y dos criados de a pie.

SENESCAL

Segunda autoridad del Temple, suplía al Maestre en sus ausencias.

MARISCAL


Mandaba a los Templarios en la guerra y el combate si el Maestre no estaba presente.

COMENDADOR DE LA TIERRA DE JERUSALÉN


Tesorero y gestor de las finanzas de la Orden. Era asimismo, el jefe de la marina templaria y guardaba la Vera Cruz en las batallas. Se encargaba en la ciudad santa de la protección de los peregrinos y de la vigilancia de los caminos, que eran los fines fundacionales del Temple.


VESTIARIO


Encargado de la uniformidad de los caballeros, escuderos y sirvientes. Asistía a las ceremonias de iniciación.


COMENDADORES TERRITORIALES


Estaban en Palestina (Acre) y Siria (Antioquía). De ellos dependía el conjuntos de castillos de cada región.


TURCOPLERO


Jefe de la caballería ligera indígena, que formaba el escuadrón de los turcopolos.

COMENDADORES PROVINCIALES Preceptores de las diferentes provincias en las que se dividía las Orden. Se encargaban de administrar las donaciones, cuidar de los hermanos que tenían a su cargo y debían enviar la mayor cantidad de dinero posible a Tierra Santa.

El grial y los Templarios


Santo Grial es el plato, patena o copa usado por Jesucristo en la Última Cena, del cual se dice que posee poderes milagrosos. La relación entre el Grial, el Cáliz y José de Arimatea procede de la obra de Robert de Boron Joseph d’Arimathie, publicada en el siglo XII. Según este relato, Jesús, ya resucitado, se aparece a José para entregarle el Grial y ordenarle que lo lleve a la isla de Britania. Siguiendo esta tradición, autores posteriores cuentan que el mismo José usó el cáliz para recoger la sangre de Cristo y que, más tarde en Britania, estableció una dinastía de guardianes para mantenerlo a salvo y escondido. El primer autor en mencionar al Grial es, entre 1181 y 1191, el poeta Chrétien de Troyes en su narración Perceval –también llamada Le Conte du Graal. La obra, presentada como tomada de un libro antiguo, habla de la visita de Perceval –quien aspira a ser caballero del Rey Arturo– al castillo del Rey Pescador, en el cual le es mostrado un grial. Dentro del mismo hay una especie de oblea que, milagrosamente, alimenta al herido padre del Rey. Perceval no pregunta por el significado de este objeto, lo cual le es reprochado más tarde. Aunque posee un claro simbolismo cristiano, Chrétien no explica en qué consiste el grial, y la obra se interrumpe bruscamente. El autor no lo denomina «santo», ni lo designa como «el grial», sino simplemente como «un grial» y considera más importante su contenido –alude a la hostia consagrada del catolicismo– que el recipiente. (Fuente: Wikipedia)









Historia de la Orden

HISTORIA

Varios años antes del reafirme de Jerusalén en 1099, un grupo de caballeros había actuado como guías y protectores de los cristianos que peregrinaban a través de las tierras santas. Esos Caballeros vivieron en una hostería cerca del Templo de Solomón en Jerusalén en el momento de la Primer Cruzada.

De ellos, cuyos nombres eran Hughes de Payns y Godofredo de Saint Omer, nace la idea de incorporar a los caballeros formalmente como un orden en 1119, tomaron el nombre de Orden de los pobres Caballeros de Cristo, pero fueron conocidos mas popularmente como Los Caballeros del Templo de Solomón o Los Caballeros Templarios.



Desde su nacimiento tuvo un fin militar, por lo que la Orden se diferenciaba a este respecto de las otras dos grandes órdenes religiosas del siglo XII los Caballeros de San Juan de Jerusalén y los Caballeros Teutónicos, fundadas como instituciones de caridad.

La Orden fue reconocido formalmente por la Iglesia en el Concilio de Troyes en 1128, y San Bernardo de Claraval, el clérigo más influyente de la época, fue comisionado para escribir los reglamentos por la que ellos se debían regir.

Un grupo de Templarios recorrió Francia y Inglaterra para reclutar a los miembros, y también para solicitar regalos de dinero y propiedad para que la Orden pudiera apoyar sus actividades militares en la Tierra Santa.

La Orden Templaria estaba encabezada por un gran maestre (con rango de príncipe), por debajo del cual existían tres rangos: caballeros, capellanes y sargentos.

Su servicio defendiendo el reino Cristiano de Jerusalén era distinguido, aunque un poco estropeado por sus malas relaciones con los Hospitalarios , que por el año 1240 se habían deteriorado a tal magnitud que caballeros de cada Orden estaban luchando abiertamente en las calles de Acre.

Después de la Batalla desastrosa de Hattin en 1187, Saladín tomó a prisionero aproximadamente 200 Templarios y Hospitalarios, incluyendo a ambos Grandes Amos, y dio orden de ejecutar a todos. Con Jerusalén en manos de los musulmanes su cuartel general se localizó sucesivamente, en Antioquía, Acre, Cesárea y por ultimo en Chipre.

Como los Caballeros Templarios enviaban regularmente dinero y suministros desde Europa a Palestina, desarrollaron un eficiente sistema bancario en el que los gobernantes y la nobleza de Europa acabaron por confiar.

Se convirtieron gradualmente en los banqueros de gran parte de Europa y lograron debido a esto y a la exención del pago de impuestos y diezmos (no estaban sujeto a la ley secular, y sólo respondían al Papa), amasar una considerable fortuna. En 1307, sin embargo, el Rey Felipe IV se quiso adueñar de esa inmensa riqueza. Él y su canciller, Guillermo de Nogaret, confabularon para acusar a los Templarios de herejía y abolir la Orden.



FUENTE: http://www.los-templarios.com.ar/